Nuestra salud se ve cada vez mas amenazada por la contaminación electromagnética y ambiental, por las nanoparticulas, por microplásticos y por residuos de medicamentos etc.

Nuestra vida se ve afectada por toda una variedad de influencias
energéticas peligrosas y omnipresentes en todo nuestro alrededor. Nuestras residencias y también los centros comerciales contienen
energías perturbadoras de diferentes orígenes. Las consecuencias son de naturaleza diversa sin que se puedan adjudicar a una causa en concreto.

Por ejemplo:

• problemas del metabolismo y del sistema nervioso
• acidez
• migrañas
• cansancio e insomnio
• ruidos molestos en los oídos (tinitus)
• alergias y trastornos del sistema inmune
• cáncer
• trastornos depresivos y ansiedades

Todos estos síntomas son especialmente apreciables tras una sanación espiritual. Con frecuencia, las personas notan a través de su percepción mas sensible después de tal tratamiento que no se sienten del todo bien en su casa , en su apartamento o en su lugar de trabajo.
La sanación espiritual se puede realizar también en edificios! La alquimia logra armonizar y eliminar aquellos síntomas que nos afectan o enferman.

Para ello, se consigue que todas aquellas energías que tengan una incidencia negativa o patógena sobre el organismo humano, sean transformadas o armonizadas gracias a la intervención de una fuerza espiritual generada desde la distancia. Entre las energías que aparecen en los edificios se encuentran las venas acuáticas, radiaciones terrestres, Wifi y antenas, radiaciones producidas por los materiales de construcción, toxinas ambientales, residuos de la fabricación industrial, restos de energía y recursos del esfuerzo de guerra y muchas más.

Otros perjuicios vienen causados por los aditivos alimenticios, fertilizantes artificiales, efectos secundarios de los medicamentos, empastes de amalgama, etc, por nombrar algunos.

Estos trastornos se tratan en el contexto de la sanación espiritual y se consiguen neutralizar o eliminar gracias a la alquimia espiritual.”